La decisión de volver con un ex a veces tiene sentido, pero en muchos casos supone un error porque los motivos que llevaron a la ruptura suelen seguir presentes, de forma parcial o completa. No obstante, también se dan casos de parejas que retoman una relación sentimental con éxito después de un tiempo de separación.
No hay una respuesta definitiva a la pregunta “¿Debo volver con mi ex?” puesto que cada vínculo tiene características propias y no todas las relaciones funcionan igual. No obstante, hay algunos aspectos generales que puedes tener en cuenta para valorar mejor esta decisión, especialmente si tienes problemas de dependencia emocional.
¿Cómo saber si debo volver con mi ex?
Aun siendo cierto que haber roto con una pareja normalmente es una señal clara de que un nuevo intento de relación tampoco funcionaría bien, toda norma tiene sus excepciones. A veces, recuperar una relación después de que pase un tiempo permite que las dos personas se reencuentren en un estado mental distinto y que dejen de darse los desencuentros que llevaron a la ruptura. Cabe decir que esto no es lo más común, aunque pueda pasar.
Procura hablar sobre tu dilema con personas cercanas de cuyo criterio te fíes y que creas que pueden valorar bien la situación. Lo más probable es que sean capaces de darte opiniones útiles para decidir si te conviene volver con tu ex o no; como es lógico, cada cual tiene una percepción subjetiva de las cosas, pero cuando estamos en un momento emocionalmente intenso nos resulta más difícil pensar con racionalidad y podemos beneficiarnos en mayor medida del apoyo y del feedback de los seres queridos.
Como sucede con cualquier cuestión que resulte complicada a nivel emocional, acudir a un psicólogo puede ayudarnos a valorar con mayor claridad el hecho de si debemos volver con una ex pareja o no. Esto es recomendable sobre todo para personas que tengan problemas para tomar decisiones en general o para manejar las relaciones de pareja, en caso de que suela haber malestar como consecuencia de estas dificultades.
Motivos para no volver con un ex
Un aspecto evidente a valorar si estás pensando en volver con un ex es si esta persona te resulta “tóxica” de alguna manera -es decir, si vuestro vínculo te afecta o afectaba de una manera negativa en lugar de positiva. Como ejemplo extremo, volver con un ex que te ha maltratado psicológica o físicamente nunca es una buena decisión, por muy fuerte que sea tu impulso de retomar la relación.
Si tu ex pareja te fue infiel o rompió de algún otro modo el pacto de la relación que manteníais, antes de decidir volver con él o ella es importante que tengas presente que puede volver a producirse una situación similar. Asumir un riesgo de este tipo es una opción válida si a ti te parece aceptable, pero no conviene tener esperanzas muy fuertes de que la otra persona vaya a cambiar. Todas las personas pueden cambiar aspectos de su forma de comportarse, pero esto no siempre sucede incluso si hay intención de que así sea.
Otra situación habitual en la que en general no conviene volver con un ex es cuando nuestros sentimientos por la otra persona son mucho más intensos que los que él o ella tiene por nosotros. Por lo general esta clase de desequilibrios provocan que la relación resulte insatisfactoria para uno de los miembros de la pareja o para los dos.
Antes de volver con un ex, pregúntate si los factores que condujeron a la separación siguen activos. Si es así, posiblemente retomar la relación no sea la mejor idea; si las circunstancias siguen siendo las mismas, es complicado que la dinámica de la relación cambie.
La importancia de adaptarse a la soltería
Muchas personas tienen problemas relacionados con la dependencia excesiva de sus parejas y sufren mucho malestar cuando se quedan solteras. En casos así es más probable que uno se plantee volver con su ex cuando surge esa posibilidad, incluso si se trataba de una relación “tóxica”.
Para evitar la inquietud o el bajo estado de ánimo que mucha gente asocia a la soltería, es frecuente que se inicien relaciones intensas muy poco tiempo después de una ruptura, incluso si la persona no está preparada para un nuevo vínculo. Esto no sólo puede favorecer que la nueva relación no funcione, sino que también bloquea el procesamiento emocional de los sentimientos provocados por la ruptura y por la sensación de soledad a la que nos referimos.
Acostumbrarse a estar sin pareja a menudo es importante para el desarrollo emocional de las personas, especialmente las que tienen tendencia a esta clase de dependencia. Si te planteas volver con tu ex o empezar una nueva relación de forma precipitada para huir de la soltería, recomendamos que te plantees optar por familiarizarte con la nueva situación para desarrollarte más como una persona independiente.
Bibliografía:
- Mearns, J. (1991). «Coping with a breakup: negative mood regulation expectancies and depression following the end of a romantic relationship«. Journal of Personality and Social Psychology, 60(2): 327–334
- Morgan Jr., J. P. (1991). «What is codependency?«. Journal of Clinical Psychology, 47(5): 720–729